Se viene con todo. La Cooperativa Amazónica de Conservación Voluntaria y Comunal (Cooperamaz), que reúne a diecinueve iniciativas de conservación san martinenses, mira con mejores ojos al futuro. Y es que esta semana se desarrolló la segunda fase del taller evaluativo que terminará seleccionando al jefe de planta y operarios de la pequeña fábrica de procesamiento integral de coco instalada en Dos Unidos, Bellavista.

MAS NOTAS AMPEANAS: El plan de los guardianes

Silvia Bellido, química de Amazónicos por la Amazonía (Ampa) fue la encargada de dictar el curso “Análisis de peligros y puntos críticos de control” (HACCP, por sus siglas en inglés) que es un proceso sistemático preventivo para garantizar la inocuidad alimentaria​ de forma lógica y objetiva.

“En esta segunda parte participaron los candidatos que alcanzaron los mejores puntajes de la primera fase que fue sobre buenas prácticas de manufactura. Son seis personas, dos de cada concesión, las que están concursando para aplicar como operario y supervisor de la planta de procesamiento”, indicó Bellido.

Pero si algo une a todos los candidatos es que se saben al revés y el derecho el procesamiento del coco en sus subproductos como el coco rallado y el aceite, pues la planta ya viene trabajando hace más de seis meses a manera de prueba y en pequeña escala.

El taller, en el que también participó personal de Ampa adscrito a la dirección de Economías Verdes, terminó con un exhaustivo examen sobre HACCP que, como se sabe, fue inventado por la NASA para asegurar la inocuidad de la comida de los astronautas en los años sesenta y que ahora se aplica y es obligatoria en muchos países como el nuestro.

Además del personal capacitado, la jornada sirvió también para certificar la planta en HACCP, un requisito impuesto por la Dirección General de Salud Ambiental para los procesos de alimentos transformados. Esta actividad fue posible gracias al invalorable apoyo de Andes Amazon Fund.